Ahora sí me perdí por bastante tiempo de este espacio. Y es que, entre trabajo, video juegos, series de temporada y mi adicción por dormir leyendo mangas se me ha escapado la vida. Pero, ya estamos de regreso y es que muero de ganas por compartir con ustedes mi opinión sobre Gokukoku no Brynhildr o también conocido como Brynhildr in the Darkness.
Para empezar, hagamos un poco de contexto sobre este manga; ya que muchos desconocen que es una historia creada por el mismo autor de Elfen Lied, Lynn Okamoto. Si comienzas a leerlo enseguida notarás la mano del autor a todo lo que da; ya que este hombre crea universos donde la sangre y tragedia son pan de cada día. Además, que tiene un gusto por explotar la sexualidad femenina que bien ha quedado marcado en sus historias.
Teniendo esto en cuenta, ahora podemos darnos una idea de que va está serie; la cual he de comentar tuvo una adaptación animada que se estreno en 2014. Está serie contó con 13 episodios y nos narra apenas los hechos ocurridos en poco menos del primer tercio del manga; para desfortuna de los que disfrutamos este anime, la popularidad no llego a ser la suficiente para poder ver otra temporada.
Si no llegaron a verlo les dejo el opening de Brynhildr in the Darkness.
Y les recomiendo le den una buena oportunidad si disfrutan del gore y la comedia romántica (lo sé, es una espeluznante combinación).
Me gustaría poder comentar más detalles sobre el anime, pero realmente les mentiría ya que lo vi en su momento semana a semana; por lo que ahora solo tengo pocos recuerdos y no podría hablar a conciencia sobre ello.
Ahora hablemos del manga Brynhildr in the Darkness
Aquí si puedo meter mi cuchara a gusto, ya que recién terminé de mi maratónica jornada leyendo el manga. Una historia cuya sinopsis es la siguiente.
Tenemos a Ryōta Murakami un chico normal, cuya única preocupación es sobresalir en sus notas para poder cumplir su sueño de trabajar para la NASA. Un objetivo que tomo debido a un acontecimiento trágico que marco su niñez; la muerte accidental de su amiga de la infancia llamada Kuroneko, y cuyo sueño era probar que existían los alienígenas.
De repente, un día se aparece en su clase una compañera de intercambio que luce exactamente igual que aquella amiga de la infancia supuestamente fallecida; lo que da un vuelco a su vida. Sobre todo, cuando está chica llamada Kuroha Neko le salva la vida a Murakami con ayuda de unos misteriosos poderes; aquí es cuando se empieza a revelar que existen chicas con poderes llamadas «brujas», un centro de investigación donde se les somete a inhumanos experimentos y también que todas ellas tienen un muy cruel destino.
¿Qué hace de está historia algo especial?
Está historia nos presenta una formula similar a la vista en Elfen Lied; un protagonista masculino rodeado de chicas para todos los gustos ( ͡° ͜ʖ ͡°). Sin embargo, el autor optó por llevar está base al siguiente nivel.
En está historia, desde el principio se sientan las bases para una trama bastante trágica. Ya que todas las chicas están ligadas a su necesidad por consumir un medicamento que les permita vivir un día más. En caso de no consumirlo, sus cuerpos empezarían a deteriorarse y derretirse, hasta solo quedar una plasta de lo que ellas fueron. Y encima, cuentan con un dispositivo en sus nucas que si es expulsado les provocaría el mismo final de forma inmediata.
Y a sabiendas de ello, deciden escapar del centro de investigación donde son prisioneras y arriesgarse para poder vivir al menos unos días la experiencia de ser una chica normal. Aquí es donde entra Murakami, quien impulsado por su sentido de culpabilidad con respecto a la muerte de su amiga en la infancia, se lanza de lleno a hacer hasta lo imposible por regalarles a las chicas una vida normal; aunque eso, eventualmente lo llegué a poner su vida en riesgo más de una ocasión.
La crueldad del plot en está historia es contrapunteada con los momentos de slice of life que el autor nos ofrece; donde podemos ver a las chicas viviendo perfectamente normal. Y más allá de ser solo momentos cliché para fanservice, sirven para provocarnos a los lectores un sentido de empatía por cada una de ellas y su odisea por tratar de mantenerse con vida al menos un día más; una búsqueda por abrazar esa oportunidad de ser felices que les fue arrebatada al ser encerradas en el laboratorio.
¿Son bien aprovechados estos argumentos?
En Gokukoku el autor nos plantea un mucho mejor desarrollo de los personajes; y una trama que va construyéndose paulatinamente entorno a los mismos elementos que el autor va colocando. Por que si en algo fallo Okamoto a la hora de desarrollar Elfen Lied, fue en optar por sacarse varias situaciones de la manga; que resultaron más como historias abruptas e improvisadas para llegar al final.
Aquí habrá algunos spoilers, así que si no han leído la historia no se la arruinen.
El autor al inicio nos plantea enfrentamientos que dejan de manifiesto un mundo con matices; ya que, algunas de las brujas enviadas por el laboratorio para asesinar a las fugitivas son impulsadas por la amenaza de ser asesinadas en la forma más cruel posible.
Una primicia que da pie a momentos desgarradores durante el desarrollo de la trama; ya que podremos ver como nuestras protagonistas no son las únicas con la ilusión de ser libres y ellas mismas por al menos una vez en sus vidas.
Así mismo, este formato va evolucionando paulatinamente; hasta llegar a ofrecer nemesis despiadados que se han vuelto locos por los inhumanos experimentos sufridos o también por seres que alcanzan un complejo de dios debido a sus capacidades excesivamente superiores.
También tendremos varios giros argumentales que dejan de manifiesto las ambiciones de los villanos que mueven los hilos de todo; que retorcidas o no, cuentan con impulsos que pueden ser catalogados como «muy humanos», que tocan temas profundos como el origen de la humanidad y la imperante necesidad de depender de las religiones.
Tal vez, la mayor virtud es que en está obra el autor supo mantener la tensión en momentos críticos de sus personajes; y también, no se tentó el corazón a la hora de decidir el destino de los protagonistas. Así que te aseguro tendrás un nudo en la garganta más de una vez.
Este fue un punto que fue muy flojo en su anterior manga, donde prácticamente dejo intocables a todos los protagonistas; salvándolas por los pelos en cada ocasión que estaban en peligro y restándole credibilidad al argumento.
En conclusión…
No puedo decir que esté manga haya sido perfecto; pero si represento un paso hacia delante del autor para bien. Y es una obra que si le das la oportunidad te enganchará con la humanidad de sus personajes, la crudeza de su historia y los giros argumentales que aumentan la tensión del lector.
Su principal pecado es el final apresurado que le dio el mangaka; ya que, en lo personal no me termino por convencer la forma en que terminó, siento que pudieron resolverse más detalles y hacer un epílogo en forma que nos dejará con un mejor sabor de boca.
A pesar de ello, es una recomendación fija que no debes perderte si gustas del anime y el manga. Es lamentable que no tenga la popularidad que merece este manga; pero espero que con este granito de arena otros se animen a darle su oportunidad.